El tema de las tendencias de moda se ha convertido en uno un poco controversial. Se piensa que tienes que ser de las personas que siguen 100% las tendencias o de las personas que no siguen para nada las tendencias. Pero como mucho en la vida, la clave está en el balance y en adaptar lo moderno a tu estilo de vida. Al menos, ese es mi pensar. Así que divirtámonos con las tendencias primaverales y veraniegas que este año, más que otros, se trata de eso: de devolvernos la diversión con la moda.
Que la palabra “mini” no te asuste. Una minifalda es aquella que queda por encima de la rodilla. Personalmente, las minifaldas no dominan mi armario, ya que para mi estilo de vida y los lugares que más frecuento, una minifalda no es tan adecuada. Sin embargo, disfruto usarlas para ciertas ocasiones (especialmente en primavera/verano). Aunque en las pasarelas de este año, el corto de las faldas fue un poco extremista, puedes optar por una opción parecida a las que llevo puestas aquí. Una minifalda blanca es un éxito para el verano, y más en una isla tropical como el de Puerto Rico. De igual manera, puedes optar por una como la de “polkadots” que traigo aquí. El fruncido de la tela la hace ver más corta de algunos ángulos, pero la verdad es que es un largo cómodo para mí. Si no quieres invertir en una minifalda, también puedes optar por trajecitos cortos como el que llevo en las fotos; otra manera de llevar la tendencia.
Una tendencia que se ha ido asomando es la de las carteras grandes. Quizás porque después de la pandemia, nos dimos cuenta de que de repente necesitamos cargar la vida con nosotros, es que entonces dejamos atrás los famosos micro bags. Así que saca tus carteras grandes que, la verdad es que son mucho más prácticas, y entre más grande, ¡mejor! En las fotos yo cargo una de flecos súper dramática (hablaremos del drama más adelante), y una un poco más sencilla tipo “beach bag”.
No es sorpresa para nadie que esta tendencia esté aquí. La verdad es que ahora mismo, entramos a las tiendas y sentimos una explosión de color por todos lados. Los colores están en su máxima expresión. La clave aquí, es que ya no se trata de tener un outfit bastante neutral y añadir un pop de color. Ahora se trata de que el color sea el protagonista del outfit. Aunque el color del año según Pantone es el Very Perri, hay dos colores que han dominado en las pasarelas: el verde y el rosado.
El verde comenzó a estar en tendencia quizás en el otoño del año pasado, estando bien consistentemente en la moda de fin de año en su tonalidad esmeralda. Este año evoluciona a un verde tipo trébol, y está por todos lados. En el primer outfit lo llevo en mi camisa y sandalias y lo combino con blanco. En el segundo outfit te enseño una manera bien fácil de llevarlo, pues está presente en el patrón de mi traje, ahorrando entonces el paso de combinarlo. Puse acentos verdes con mi cartera (drama de nuevo, ¡recuerden!) y con mis sandalias. Pero si eres súper colorida y quieres entrar de lleno en la tendencia, te muestro un “look” monocromático con verde ¿te atreves?
Les cuento que antes del año pasado, no había una sola cosa de color “Barbie Pink” en mi closet. Aun así, le he cogido el gustito. El rosa de igual manera que el verde, ha evolucionado de su tonalidad pastel a su tonalidad “Barbie”, como le llamo yo. Como comenté con el verde, en el outfit del traje brindo una opción sencilla de llevar el color, pues está dentro del patrón. Más abajo te enseño una opción del color con un top rosado y mahones.
Otra tendencia que me llevó a salir de mi zona de confort fue la de las plataformas. Este año los zapatos vienen al estilo “Bratz” (entre más dramáticos mejor). Abajo te muestro dos opciones que me encantan. Al esta tendencia ser una que, como les dije, no es muy “yo”, opté por opciones que sé que me seguirán gustando cuando cese eventualmente la “fiebre”. Unas plataformas neutrales en saco son un “must” para un clima tropical como el de Puerto Rico. Las plataformas color rosa, son un poco más arriesgadas, pero aún así, considero que pasarán la prueba del tiempo.
Siento que cuando dije esto el año pasado para la temporada de otoño, dudaron un poco de la fuerza con la que pudiera venir esta tendencia. Pero la verdad es que en las pasarelas de primavera/verano 2022, no hubo un estampado como “rayas” o “gingham” que dominara. Al contrario, los patrones eran expresivos, artísticos, cargados, justo como en la década de los 70. El traje que les había mostrado tiene un patrón exactamente así: cargado, con flores y figuras geométricas, con varios colores, etc. El del top rosa que muestro también es bien “setentoso” pero un poco menos llamativo porque lleva menos colores en sí mismo.
Otra tendencia que no debe de sorprender es la de los pantalones acampanados. Fuimos de “skinny jeans”, a “mom jeans”, a mahones anchos, y ahora, a mahones acampanados. Ya casi llegando a los famosos “bell bottoms”, la tendencia en mahones y pantalones es usarlos cada vez más anchos. Puedes optar por unos bien acampanados como los mahones que llevo puestos, o por unos más recogidos pero que siguen siendo anchos, como los blancos en hilo que traigo abajo.
Una tendencia que sí es bien “yo” es el uso de perlas. Hemos visto a las perlas teniendo un “comeback” en los últimos años y siguen siendo protagonistas en cuanto a las prendas se refiere. Lo que hace de esta pieza clásica, una “tendencia” es que ahora la estamos sacando para nuestro diario en vez de guardarlas para ocasiones especiales. Después de años pandémicos, las casas de moda están básicamente diciendo: saca tus perlas, tu brillo, tus diamantes (aunque no sean de verdad) y póntelos para el diario con tus outfits casuales (¡drama, drama, drama!). No hay tiempo que perder cuando de disfrutar tus piezas se refiere. Siempre he estado de acuerdo con esto y me ha encantado combinar piezas bien elegantes con piezas bien casuales y crear esa yuxtaposición. En las fotos llevo mi collar y mi “earcuff” de perlas con un outfit en lino de diario y mi accesorio de cabello de perlas con mahones.
De todas las tendencias de este año, ésta me parece la más interesante. Debido (una vez más) a la pandemia, muchas bodas han sido pospuestas en los últimos años. A consecuencia, el 2022 se espera que sea de los años en que más bodas serán celebradas. La moda se adapta a nuestra situación social. Por eso, una tendencia bien común en las pasarelas de primavera/verano, fue el “bridal fashion”. ¿Qué significaría el “bridal fashion” en nuestro diario vivir? Vestir de blanco, vestir siluetas románticas, vestir con perlas y pedrería, vestir con diademas o accesorios del cabello, son algunos ejemplos de cómo podemos llevar esta tendencia. Les brindo estas dos opciones: primero un traje blanco con mangas abullonadas estilo princesa que siento que es perfecto para llevar la tendencia; segundo una combinación de top y falda un poco más casual que, no solo es completamente blanco, sino que el top también tiene un elemento de plumas que le da ese toque “bridal chic”.
Si hay una palabra que se ha repetido en este post es ¡drama! Les dije que estuvieran pendientes y se acordaran de esta palabra. Si hay una tendencia entre todas las tendencias de primavera/verano 2022, es vestir buscando lo exagerado, grande, atrevido, colorido, brillante, elegante, llamativo… en fin, ¡dramático! Socialmente, se está comparando mucho los años que estamos viviendo con la época de los 20 conocida como los “roaring 20’s”, ya que estamos en proceso de recuperación de un tiempo histórico negativo que, en cuanto a la moda se refiere, nos obligó a vestirnos extremadamente casual y digamos aburrido, triste, sencillo. Es por eso que este año estamos viendo cambios en la moda que son básicamente el otro extremo. Por eso, saca el brillo que usualmente guardas para las navidades o para la noche y póntelo de día. Usa piezas como el abrigo de Mahón que tengo puesto en las fotos: que combinan un elemento súper casual (el mahón) con un elemento que representa fiesta, celebración, evento especial (los rhinestones). Si no quieres invertir en una pieza así, puedes hacerlo tú misma. Ponte mahones con tacos de brillo, o un sweater con aretes de rhinestones, una falda de vestir con una “t-shirt”, etc. De igual manera, diviértete usando piezas como mi traje con las mangas de princesa o mi top con plumas. Este año, en primavera/verano, la creatividad es protagonista y la meta es vestir todos los días, como si fuera un día especial: el de celebrar que seguimos aquí, después de tan difíciles tiempos.